La vida es bella ...
Reflexiones sobre la vida diaria para la gente de a pie.

HERMANO LOBO

Paco Castro ofm . contacto

Las biografías de San Francisco narran un acontecimiento que tuvo lugar en un pueblo no muy lejos de Asís: Gubbio. Cuentan las crónicas que un lobo feroz habitaba en las cercanías de la población y que de vez en cuando se acercaba a causar estragos, atemorizando a los vecinos. Francisco lo supo y accedió a hablar con el lobo a quien trató de hermano cerrando con él un trato: si no atacaba a nadie ni causaba daños los vecinos del pueblo accederían a alimentarle por la cara, sin pedirle a cambio otra cosa que el que les dejase en paz. Dicho y hecho, y se obró el milagro.

El lobo feroz puede simbolizar nuestra cara más oculta y negativa, nuestra violencia interior, nuestra negatividad, todo aquello que nos deshumaniza y nos hace ser temidos o despreciados por otras personas. Te invito a que, cual Francisco de nuestros tiempos, te adentres en tu Gubbio personal y “domestiques” tu fiereza. Verás que el primer beneficio de esta actitud consiste en que te sentirás mejor, estarás a gusto contigo, con tu persona. Y el segundo gran beneficio es consecuencia inmediata de esa misma actitud: los demás verán en ti antes bien una persona digna de ser amada que un lobo feroz al que hay que temer, un espanta amigos/as. La vida cambia cuando se cambia por dentro: ¡pruébalo!